Microempresarios de Oaxaca lanzan a los chapulines como “atractivo gastronómico”


Ruiz, A. V. (2006, 15 de Enero). Microempresarios de Oaxaca lanzan a los chapulines como “atractivo gastronómico”. La jornada. Recuperado de http://www.jornada.unam.mx/2006/01/15/index.php?section=economia&article=025n1eco

En los diferentes pueblos de Oaxaca es usual el consumo de insectos, en la región de los valles centrales se consume principalmente a los chapulines así mismo se consumen a las chicatanas, larvas de hormigas, gusanos blancos y rojos del maguey.

La idea del proyecto de la microempresa Industrias Alimentarias (INALIM) que se plasma en este nota periodística surgió por parte de Roberto Pérez Hernández, ingeniero en alimentos egresado de la Universidad Tecnológica de la Mixteca (UTM) quien desde el 2004 se dio a la búsqueda de un nuevo tipo de necesidad en la población, topándose con la cultura de la entomofagia, la alimentación con base en insectos, incluida en la gastronomía oaxaqueña.

Como sabemos Oaxaca es uno de los estados que mayor cultura entomológica tiene, lo que permitió a Pérez Hernández proseguir con su proyecto en búsqueda de un nuevo producto que se pudiera desarrollar con base en el chapulín.

Además de que tomó en cuenta que este insecto contiene alrededor de 50 por ciento de proteínas, debido a que su alimentación, por lo general herbívora, proviene de los maizales, frijolares, trigales, alfalfares o pastos silvestres.

Posteriormente la metodología de su proyecto fue basada en que el chapulín (Sphenarium purpurascens) es un insecto conocido en la cocina de los mexicas, zapotecas y mixtecas, y en otras culturas mesoamericanas antes de la llegada de los españoles, y que con frecuencia se puede observar en venta en los mercados de nuestro estado así como en los días de plaza de las comunidades pertenecientes a la región de los valles centrales.

Después de varios meses de investigación junto con su equipo de trabajo llego a diseñar diversos productos envasados de este insecto los cuales se pueden encontrar a la venta en tiendas de autoservicio de las ciudades de Oaxaca, Distrito Federal, Tijuana, Mexicali y Chiapas.

Algo que me parece muy importante en esta nota periodística es que al considerar al chapulín como parte de la dieta de nosotros los Oaxaqueños se comenzaron los trámites para conseguir su denominación de origen.

Considero que la implementación de esta micro-empresa marca la pauta para que muchas de las personas que se dedican a la colecta y venta de este insecto puedan conseguir más ingresos contribuyendo en dicho proyecto. Ya que la industrialización del chapulín para fines alimenticios es una buena opción para los pobladores de comunidades agrícolas que se enfrentan al chapulín como una plaga. Cuando un cultivo es fumigado con pesticidas no solo se termina con los chapulines sino que también se daña al medio ambiente así como a todos los insectos que habitan dichos ecosistemas; además de contaminar el suelo, agua y también provocando la muerte de muchas otras especies como aves o roedores.

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