Linton y Budds (2013)

Linton, J., & Budds, J. (2013). The hydrosocial cycle: Defining and mobilizing a relational-dialectical approach to water. Geoforum(0).

http://www.sciencedirect.com/science/article/pii/S0016718513002327

El ciclo hidrosocial, se basa en el concepto de ciclo hidrológico, pero mientras el ciclo hidrológico separa el contexto social, el ciclo hidrosocial asiste deliberadamente a la naturaleza social y política del agua, en el que el agua y la sociedad interactúan en el espacio y tiempo.

La relación entre el agua y  la sociedad, ha traído un considerable interés académico y popular a través de temas como la escases mundial del agua, la gestión de cuencas hidrográficas y la privatización del agua. Gran parte de este interés radica en que el manejo del recurso hídrico no solo es un campo técnico que puede ser abordado a través de la provisión de infraestructura y conocimientos científicos, si no abarca también al sistema político,  valores humanos, y el comportamiento y  organización de la sociedad.

La gestión del agua,  tiene un efecto importante sobre la organización de la sociedad, que a su vez, afecta a la disposición de agua, lo que da lugar a nuevas formas de organización social,  y así sucesivamente, en un proceso cíclico.

Como en un ciclo,  no hay principio  ni fin necesario para el proceso, la alteración del ciclo hidrológico es por lo regular precedido por la aplicación  del poder social en intervenciones tecnológicas, tales como la construcción de presas, plantas de desalinización, o con reformas políticas como la privatización del agua. El control del agua produce ciertos tipos de relaciones de poder y estructuras de gobernanza.

Fig. 1. The hydrosocial cycle

El manejo del recurso hídrico, genera importantes transformaciones, como ejemplo: las represas construidas en el norte de Quebec, en la década de 1970 dio lugar a una alteración masiva del régimen hidrológico, el cual, tuvo un impacto devastador en la economía y la sociedad de las comunidades indígenas en la región.

En ocasiones  el acceso al agua potable no se explica por la escasez física inmediata, o la presión demográfica o la incapacidad técnica, sino por cómo los servicios de agua a menudo se organizan y gestionan a fin de privar su acceso a los grupos de bajos ingresos.

Swyngedouw  (2004) citado por Linton y Budds (2013) menciona que al igual que la investigación de la circulación del dinero y el capital ilustra el funcionamiento del capitalismo como sistema económico, la circulación del agua - como un proceso físico y social - saca a la luz los procesos políticos, económicos , el social y el ecológico, de una manera más amplia.

El ciclo hidrosocial ofrece un enfoque crítico que nos mueve a considerar cómo se internaliza el agua y esto se refleja en las relaciones sociales y de poder, que de otra manera permanecerían invisibles. Esto, en la práctica, implica que tenemos que pensar de forma diferente sobre el agua, atender a las circunstancias sociales de la circulación del agua, y hacer preguntas acerca de cómo el agua, las estructuras sociales, relaciones de poder, y las tecnologías están relacionadas internamente.

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