Halfter, G. y C.E.
Moreno. (noviembre 2005). Significado biológico de las diversidades alfa, beta
y gamma. En: Halfter, G., J. Soberón, P. Kolef y A. Melic (eds.), Sobre
diversidad biológica: El significado de las diversidades alfa, beta y gamma (4:5-15).
Zaragoza, España.
El estudio de la
riqueza de especies en un espacio determinado, se puede realizar bajo dos
aproximaciones, si la riqueza de especies representa una propiedad de las
comunidades en términos de su estructura y funcionamiento o una expresión de la
historia evolutiva en un espacio determinado; por lo que es importante
determinar en qué punto de la escala espacial y temporal se puede identificar
su significado biológico. Dentro de una comunidad el número y condición de las especies,
así como procesos ecológicos, tienen relación con el pool regional y con la evolución de un espacio mayor, tal como los
paisajes que abarca. Es a nivel de paisaje (mesoescala) donde los cambios
ocasionados por actividades humanas como la fragmentación, muestran los efectos
más importantes como extinción o permanencia de especies; esto se debe a que el
ser humano ha establecido un orden en la naturaleza, al escoger y favorecer,
entre otros recursos, plantas y animales que son de utilidad, que al pasar del
tiempo se ha modificado la mayoría de los paisajes terrestres y reducido la
biodiversidad, con lo que además se reducen las opciones o posibilidades.
Una de las formas para
determinar las condiciones del paisaje y los efectos de los cambios antropogénicos
es mediante grupos indicadores, su elección dependerá del tipo de paisaje y de
respuesta a las alteraciones. Para el estudio de estos grupos se puede emplear
el número de especies y su abundancia. Con estos datos es posible realizar una
aproximación para evaluar el número de especies presentes en un lugar, mediante
la diversidad alfa puntual, su empleo
es necesario debido a que el número de especies puede variar de un sitio a otro
y a diferencia del paisaje es sensible a cambios ocasionados por especies raras
y turistas, efecto de masa (llegada de individuos de una especie a la alta
densidad demográfica de esa especie en otra comunidad), el área que ocupa la
comunidad y la heterogeneidad del paisaje (presencia de especies fuera de su
hábitat óptimo), la cual se da en regiones tropicales.
Entre dos puntos,
comunidades o entre paisajes puede llevarse a cabo el recambio de especies, de
la cual resultan diferencias que son medidas por la diversidad beta, que es una medida de la heterogeneidad del
paisaje. Un ejemplo es México, país que debe su megadiversidad a su condición
heterogenea en orografía y clima, es el único lugar en el mundo donde se
sobreponen dos regiones biogeográficas (neártica y Neotropical); estas
condiciones dan como resultado un elevado recambio de especies, es decir, una
diversidad beta muy alta. Entonces con base en el análisis de la diversidad
alfa y beta podemos cuantificar y explicar la diversidad gamma, la cual es el número de especies del conjunto de
sitios o comunidades que conforman el paisaje.
Al entender relaciones
de lo puntual y lo regional, entre los ensambles presentes y el pool de posibilidades, hay una
aproximación para comprender el porqué de tantas especies y de su ubicación. Por
ejemplo, la alteración del paisaje, en condiciones puntuales (alfa puntual)
puede mostrar pérdida de especies, pero al incrementar el remplazo (beta)
debido a la oferta de nuevas condiciones se puede resultar en una mayor
diversidad del paisaje (gamma). Entonces, una alternativa para entender los
efectos de la fragmentación y modificación antrópica es el estudio de estas tres
expresiones de la biodiversidad (alfa, beta y gamma).
Imágenes:
obtenida
2 de marzo 2014
obtenida
2 de marzo 2014
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