Graeber, D.
(2001).Toward An Anthropological Theory
of Value: The False Coin of Our Own Dreams. New
York, United States of America:Palgrave.
¿Postmodernismo? ¿Globalización? ¿Cuáles son los
argumentos que sustentan a estos conceptos como una postura política o
pensante? Actualmente las respuestas solo se limitan a aceptar a estos
conceptos como la descripción de los hechos consumados. Tal parece que estos fenómenos
se derivaron de las fuerzas estructurales del mercado universal, al que todo el mundo se tuvo que adaptar.
Si podemos etiquetar a estos conceptos como “postura”
o “corriente” (porque carecen de un sustento teórico), las principales
características que las define es la ruptura y fragmentación de la ciencia, la sociedad,
la humanidad, la verdad, incluso la fragmentación del medio ambiente (una de
las principales causas de la crisis ambiental actual y la extinción de
especies), en pocas palabras, la fragmentación del mundo. El único denominador
común es el sistema de mercado global que lo subordina todo y convierte
mercatilizable: cada objeto, cada creación, cada humano, cada pedazo de tierra,
cada ambiente natural, cada cultura, etc.;
es decir, se le trata de otorgar una medida de valor a todo.
El mundo ha cambiado sin que nadie sea responsable
de ello, sucedió como algo inevitable y la humanidad entera se ha tenido que
adaptar a estos cambios. El sistema per se ha promovido la
universalización del pensamiento y el individualismo,las
acciones colectivas de resistencia y cuestionamiento no tienen lugar. La izquierda,
los colectivos subversivos y los libres pensadores han abandonado las universidades
y en su mayoría, el mundo entero ha quedado como un simple espectador, sin
lugar ni tiempo para pensar, mientras solo le importa el proceso de adaptación
para sobrevivir porque, como dicta una máxima biológica, “adaptarse o morir”.
Ante la ausencia de información que explique los
procesos que generaron el postmodernismo y la globalización, el autor aprovecha
el denominador común para hacer un acercamiento a estas posturas: el valor. La
obra trata de resolver algunos problemas en las teorías antropológicas de valor
ya que no existe una teoría aterrizada. La palabra “valor”, en general, tiene
tres connotaciones: 1) en el sentido sociológico se refiere a la concepción de
lo bueno, correcto o deseable en la vida humana, 2) en el sentido económico es
el grado con el que se desean los objetos y 3) en el sentido lingüístico se
refiere a una diferencia significativa.
El autor realiza una revisión histórica de los
estudios que han abordado cada uno cada uno de los aspectos relacionados con el
“valor”. Destacan el trabajo realizado por Nancy Munn (1977, 1983, 1986), su lenguaje es acerca
de "potencias", "potencial transformador", capacidades
humanas que son, en última instancia, genéricas e invisibles. Más que el valor
de ser el propio proceso de reconocimiento público, es la manera como la gente
que podía hacer casi cualquier cosa, evaluar la importancia de lo que hacen y
como lo están haciendo. Esto es necesariamente un proceso social; pero siempre
tiene sus raíces en las capacidades humanas genéricas. No obstante, este postulado
es criticado porque apunta en una dirección completamente distinta a las
posturas existentes que son estáticas. Por un lado los economistas abordan el
valor desde una perspectiva del deseo individualista y por el otro lado Ferdinand
de Saussure (1966) sostiene que el valor de un objeto o una persona es el
significado que adquieren al ser asignado un lugar en algún sistema más amplio
de categorías.
Asimismo, en la segunda parte del libro se tratan dos
temas principales: el intercambio y la creatividad social, expuestos por Mauss
y Marx. Mauss sirve como un complemento perfecto para Marx, mientras que uno se
dedicó a una crítica a fondo del capitalismo argumentando que el valor de las mercancías
se deriva del trabajo humano que las produce y que a menudo es olvidado cuando
los objetos se mercantilizan. El otro aborda la etnografía comparativa con su
notable “economía de regalos” que ha significado un dolor de cabeza para los
economistas, ya que en muchas de las relaciones sociales que Mauss describe,
hay implícitas más cosas que solo el intercambio económico en que cada
individuo trata de obtener su máximo beneficio.
El trabajo fue realizado por David Graeber, antropólogo
y anarquista estadounidense que en 1996 obtuvo su doctorado en la universidad
de Chicago y actualmente es profesor en el Departamento de Antropología en el
Goldsmiths
College, Universidad de Londres.
El fundamento de la obra que se utilizará para el trabajo
de investigación está la relacionado con la valorizar de cada cosa en el mercado global, en específico
en el mercado ambiental, poniendo como ejemplo las estrategias de
compensaciones por daños ambientales implementadas en México. Éstas giran en
torno a la premisa “el que daña paga”, no obstante, para establecer un valor
económico a la magnitud del daño se involucran diferentes puntos de vista. En
el caso de los murciélagos, a nivel general, son poco valorados (excepto por
biólogos, ecólogos, mastozoólogos, ecólogos etc.) porque su valor está
relacionado a creencias negativas (misticismo, brujerías, conceptos de lo que
es bello y lo que no) y a
desconocimientos de la importancia ambiental y económica. Entonces, al momento
de poner un valor económico en el esquema de compensaciones ambientales al daño
ocasionado a sus poblaciones, se deben contestar tres preguntas: ¿qué estándares
se pueden utilizar para medir su valor?, ¿Quiénes asignan el valor al daño de
sus poblaciones? Y actualmente, ¿Cómo se le puede asignar un valor objetivo a
algo a lo cual no se le ha puesto un valor?
Palabras: 893
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
Los comentarios no son moderados: cada quien se autoregula. Sin embargo, los comentarios discriminatorios serán eliminados y quien los haga será amonestado la primera vez y excluido a la segunda..
Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.