2014/03/09

Rosado-May, (2012)

Rosado-May, F. J. (2012). Los huertos familiares, un sistema indispensable para la soberanía y suficiencia alimentaria en el sureste de México. En Mariaca, R. (primera edición), El huerto familiar del sureste de México (420-434). México: ECOSUR.

Uno de los problemas más difíciles que enfrenta la humanidad es la escasez de alimentos. La producción de alimentos ha crecido en muchos países; sin embargo, las personas que demandan alimentos también han aumentado debido al rápido crecimiento de la población y la carencia de una distribución efectiva de alimentos; a todo esto se suma el deterioro de las tierras en las que se producen los alimentos y la mala calidad de ellos. A medida que la población aumenta, el panorama se vuelve menos alentador ya que cada vez es más común la imagen de gente pobre y hambrienta. Para combatir la inseguridad alimentaria, se han diseñado diferentes estrategias a diferentes niveles, sin embargo tanto como sea posible la acción debe generarse en respuesta a las necesidades de las familias. Por ello cada condición o componente desde definirse y ser elaborada para diferentes niveles. A nivel doméstico se debe tomar en cuenta la seguridad alimentaria del individuo. 

Dentro de las estrategias para alcanzar la seguridad alimentaria el huerto familiar cobra importancia, ya que la soberanía alimentaria debe tener un enfoque de sistema pero no solo del tipo de ecosistema sino también intercultural. Los huertos familiares exitosos articulan otras áreas de conservación. Si se pierde el huerto familiar como la columna vertebral, al sucumbir ante la presión de políticas mal diseñadas, crecimiento poblacional y urbanización, el sistema completo colapsa y la región pierde su potencial para tener soberanía y suficiencia alimentaria. Existen programas diseñados para combatir la vulnerabilidad alimentaria, uno de ellos es el programa PESA, sin duda ha sido un buen programa pero ha quedado corto en sus metas y objetivos, la razón es que su enfoque no tiene el nivel de integración y articulación que tiene originalmente el huerto familiar, aunque es mejor que otros programas, debido a que propone un desarrollo de manera integral y promueve un espacio de autoabastecimiento para las familias. A pesar de todos los esfuerzos la política federal requiere una modificación del tipo de extensionismo, para la producción agropecuaria y forestal, haciéndolo más profesional y con transparencia y rendición de cuentas, tampoco ha tenido grandes resultados. Han sido muchos años de la aplicación de este sistema y aún seguimos con dependencia alimentaria, no producimos en forma eficiente ni eficaz ni en forma competitiva. Nuevamente la visión integradora, a nivel de sistema, hace falta. 

Este artículo es relevante para nuestro trabajo ya que pretende sumar esfuerzos en el ángulo de análisis epistemológico y lingüístico que debe dar fortaleza y fungir como huerto familiar a los grandes esfuerzos personales, de equipo e institucionales. Con nuevos enfoques como el intercultural se abren nuevas y grandes posibilidades de generar nuevo conocimiento y por tanto respuestas a preguntas y retos como el de lograr la suficiencia y soberanía alimentaria para nuestro país.

Este articulo es una publicación en un libro editado por una institución académica de prestigio (ECOSUR), por lo que a mi parecer es de gran confiabilidad ya que aborda temas, existentes en nuestro país.  


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